MACROBIÓTICA

¿QUÉ ES LA MACROBIÓTICA?

Es el conjunto de acciones que realiza un ser humano, de forma consciente y en libertad, con la intención de ser feliz y gozar de buena salud. La macrobiótica es una palabra que significa “larga vida” y engloba los siguientes aspectos: 

• Una alimentación equilibrada basada en alimentos frescos, ecológicos, del entorno y de la estación.

• Ejercicio físico moderado

• Pensamientos y actitud positiva

• Meditación y autoconciencia

• Contacto con la Naturaleza

Se trata de encontrar el equilibrio físico, mental y espiritual para disfrutar de la vida plenamente.

CONCEPTO DE ENERGÍA

La macrobiótica busca el equilibrio a través de la energía, a la que denomina Ki. Para entender este concepto de una manera sencilla, podemos imaginarnos un pantano en el que el agua está en calma. Si arrojamos una piedra, generamos olas. Estas olas también pueden llamarse ondas, vibración o energía. Si justo al lado y al mismo tiempo arrojamos otra piedra, generamos dos series de ondas diferentes que, al chocar, o bien se paralizan, o bien se agrupen creando una onda conjunta de mayor tamaño.

Teniendo en cuenta que todo está compuesto por energía o vibración, la comida, las personas (¿no es verdad que algunas personas nos dan mejor “rollo” que otras?), el entorno, etc., lo que buscamos por medio de la macrobiótica es armonizar nuestras ondas y las del entorno para crear una onda conjunta de energía positiva que nos ayude a sentirnos mejor.

Del mismo modo, en el pantano puede haber zonas en las que el agua no fluya. Esta agua estancada, con el tiempo, se pudre. Y, esto mismo ocurre en nuestro cuerpo; si la energía se estanca en algún lugar, puede causar enfermedad. Esto suele pasar muy habitualmente con sentimientos y emociones: la ira, por ejemplo, puede crear estancamiento de energía en el hígado, que puede generar, a la larga, una patología en el órgano.

EL YIN Y EL YANG

El Ki está a su vez compuesto por otras dos energías llamadas Yin y Yang. Estas energías son opuestas y se complementan para conseguir el equilibrio.

Cada una de ellas tiene una serie de características. En la siguiente tabla se resumen algunas de ellas:

ENERGÍA YIN	ENERGÍA YANG
Expande, dispersa	Contrae, concentra
Enfría	Calienta
Humedece	Seca
Representa lo grande	Representa lo pequeño
Es débil	Es fuerte
Reino vegetal	Reino animal
Es ligera	Es pesada

 

Los alimentos, por su parte, están compuestos por energía Yin y energía Yang, las dos; pero se clasifican como Yin o Yang en base a la energía más dominante. Siguiendo esta línea, podemos clasificar los condimentos de más Yin a más Yang de la siguiente manera:

 

▼ENERGÍA + YIN

 1.- Alcohol

 2.- Mirin

 3.- Vinagre de manzana

 4.- Vinagre de arroz

 5.- Cítricos

 6.- Ajo

 7.- Especias

 8.- Zumos concentrados de frutas

 9.- Melazas

10.- Zumos de fruta fresca

11.- Amasake

12.- Hierbas frescas

13.- Hierbas secas

14.- Miso blanco

15.- Kuzu

16.- Vinagre de umeboshi

17.- Umeboshi

18.- Miso, shoyu

19.- Sal

▲ENERGÍA + YANG

Y los alimentos, de más Yin a más Yang de la siguiente manera:

▼ENERGÍA YIN        1.    Drogas        2.    Alcohol        3.    Estimulantes (café, té, bebidas gaseosas azucaradas…)        4.    Azúcares (azúcar blanco, moreno, de caña, miel, sirope de arce, helado, chocolate, fructosa…)        5.    Algas de lago y agar-agar        6.    Lácteos blandos, leche de soja, tofu crudo (mantequilla, nata, crema, leche, quesos blandos, yogur, kéfir…)        7.    Especias (curry, pimienta, mostaza, ajo…)        8.    Hierbas aromáticas        9.    Frutas tropicales y locales muy expansivas (plátano, piña, mango, aguacate, coco, pomelos, ciruelas, higos, dátiles…)       10. Verduras solanáceas y otras muy expansivas (pimientos, tomates, berenjenas, patatas, espinacas, acelgas, champiñón…) ENERGÍA MODERADA       11. Endulzantes moderados naturales (melazas, amasake, concentrado de frutas naturales…)       12. Leches de cereales       13. Frutas secas locales -sin sulfato- (pasas, albaricoques, orejones…)       14. Frutas frescas, locales y de la estación (manzanas, peras, melocotones, nísperos, cerezas, fresas, sandía, melón…)       15. Semillas y frutos secos -ligeramente tostados- (sésamo, girasol, calabaza, almendras, avellanas, nueces, cacahuetes…)       16. Verduras locales y de la estación       17. Algas (kombu, wakame, hiziki, dulse, arame, nori, espagueti de mar…)       18. Leguminosas y proteínas vegetales (lentejas, garbanzos, pintas, azukis, alubias, seitan, tempeh, tofu ahumado…)       19. Cereales integrales y pasta integral       20. Pescado ▲ENERGÍA YANG       21. Aves       22. Marisco       23. Carnes y grasas saturadas       24. Quesos secos y salados       25. Huevos, embutidos, pizzas, horneados       26. Condimentos salados (miso, salsa de soja, umeboshi…)       27. Sal

 

Hay que tener en cuenta que debemos evitar en la medida de lo posible los alimentos más Yin y más Yang; estos son los denominados alimentos extremos. Debemos elaborar nuestro menú diario mayoritariamente con los alimentos denominados moderados. ¿Por qué? Porque los alimentos extremos provocan que busquemos el equilibrio con los alimentos extremos opuestos y, de este modo, mantenemos a nuestro organismo en una continua lucha por encontrar su equilibrio. Así, el cuerpo se debilita y, a la larga, puede llegar a  enfermar.

LOS ALIMENTOS MÁS DISCUTIDOS

No hay alimentos prohibidos, excepto los que prohíbe nuestro cuerpo.

Lima Oshawa

A pesar de que la macrobiótica no prohíbe ningún alimento, sí que aconseja no tomar o tomar excepcionalmente alguno de ellos, básicamente, porque no hacen sino perjudicar seriamente nuestra salud:

• LA CARNE  Es una buena fuente de hierro y proteínas de fácil asimilación PERO nuestros intestinos son tan largos que la carne se pudre en ellos antes de ser expulsada. La consecuencia es que se destruye la flora intestinal (impidiendo la correcta absorción del resto de nutrientes), acidifica la sangre (desmineralizando nuestro cuerpo), contiene gran cantidad de grasas saturadas (elevando el colesterol y, además, haciéndonos actuar de manera más agresiva) y, en el peor de los casos, si la carne no es biológica puede contener antibióticos, hormonas, etc. que pasan directamente a nuestra sangre. Todo esto puede ocasionar problemas cardiovasculares, colesterol, estreñimiento, enfermedades del hígado, etc. Las alternativas más saludables a la carne son las legumbres, el pescado, los frutos secos y semillas, el tofu, el tempeh, el seitán…

• LA LECHE  De la leche se dice que tiene un alto contenido en calcio, indispensable para nuestros huesos; pero, lo que no se dice es que este calcio, al igual que sus proteínas y azúcares, es de difícil asimilación. Lo que quiere decir es que el cuerpo ha de realizar un esfuerzo muy grande para asimilar estos nutrientes y, para ello, necesita utilizar minerales del cuerpo; es decir, por un lado, bebemos calcio y, por otro, consumimos el calcio de nuestros huesos para asimilar el que ingerimos, ¿tiene sentido? Este proceso provoca que el cuerpo genere radicales libres lo cual hace que se debilite nuestro sistema inmunitario, haciéndonos sentir cansados, faltos de energía y vulnerables a patógenos externos (facilidad para enfermar). La leche, además, contiene grasas saturadas y colesterol, acidifica la sangre y, en consecuencia, nos desmineraliza. Otras fuentes de calcio son las algas (la hiziki, por ejemplo, tiene unas ocho veces más de calcio que la leche de vaca; la arame y la wakame, unas 6 veces más), las verduras biológicas (sobre todo las de hoja verde y blanca), semillas (sésamo) y frutos secos, legumbres, té kukicha, etc.

• LAS SOLANÁCEAS  Se llaman solanáceas a los alimentos que tienen un alto contenido en alcaloides (especialmente, solanina), tales como, tomates, pimientos, berenjenas… El aspecto positivo de las solanáceas es que, en general, son muy nutritivas y tienen un alto contenido en antioxidantes que combaten los radicales libres y, por lo tanto, nuestro cansancio. Sin embargo, acidifican muchísimo la sangre y, en consecuencia, desmineralizan nuestro organismo pudiendo provocar problemas óseos y articulares, problemas nerviosos, etc. Es interesante consumirlos pero en poca cantidad.

• EL AZÚCAR Y LOS EDULCORANTES  Es bien sabido por todos que el azúcar es perjudicial para el organismo. Entre otras razones destacan que acidifica la sangre (acción desmineralizante), elimina las reservas de vitaminas del grupo B (especialmente la B₁₂), puede provocar euforia, depresión o deterioro de la energía vital (por la alteración anormal del índice glucémico –cantidad de azúcar en sangre–), crea dependencia, etc. Las alternativas más saludables a los azúcares y edulcorantes artificiales son las melazas, el amasake, el zumo concentrado de frutas naturales, fruta fresca o seca, etc.

CÓMO REALIZAR LA TRANSICIÓN

Si no hay una razón importante para cambiar radicalmente nuestra alimentación, conviene realizar la transición de forma gradual. En la siguiente tabla se resumen los alimentos y sus alternativas más saludables:

ALIMENTOS INICIALES	ALIMENTOS DE TRANSICIÓN	ALIMENTOS FINALES
Productos comunes (transgénicos, alimentos irradiados, tratados, congelados…)	Productos frescos y, a poder ser, ecológicos	Productos ecológicos y biológicos
Agua del grifo	Agua de manantial o filtrada	Agua filtrada, de manantial, de pozo, vitalizada
Cereales refinados (arroz, pasta, pan…)	Cereales semi-integrales (pasta, pan…)	Cereales integrales (pasta, pan, arroz…)
Carne roja y huevos	Carne blanca, pescado, legumbres	Pescado blanco, legumbres, tofu, seitán, tempeh
Leche, lácteos, mantequilla	Leches vegetales, tofu, mantequilla de frutos secos	Leches vegetales, tofu, mantequilla de frutos secos
Fruta tropical	Fruta de nuestro entorno y temporada	Fruta de nuestro entorno y temporada
Azúcar, miel, mermeladas, chocolate, sacarina…	Melazas de cereal, miel, mermelada sin azúcar, agave, algarroba	Melazas de cereal, amasake, compota de frutas, calabaza, zanahoria, castañas
Bebidas alcohólicas	Bebidas fermentadas de calidad	Bebidas fermentadas de calidad
Café, té negro, té rojo	Infusiones de hierbas, té verde, café de cereales	Té kukicha, bancha, rooibos, café de cereales, té de arroz, algunas hierbas
Bollería industrial	Bollería ecológica sin azúcar, huevos ni lácteos	Galletas, postres y bizcochos caseros
Aceite y condimentos comerciales y refinados	Aceite de primera presión en frío, sal integral, vinagre de arroz, de umeboshi, limón, jengibre	Aceite de primera presión en frío, sal integral, vinagre de arroz, de umeboshi, limón, jengibre

 

SUGERENCIAS PARA UN ESTILO DE VIDA SALUDABLE

1.- Tratar de hacer realidad nuestros sueños.

2.- Vivir felizmente sin obsesionarnos por nuestra salud.
3.- Mantenernos activos física, emocional, mental y espiritualmente. 
4.- Mantener el contacto con la Naturaleza.
5.- Llevar una alimentación equilibrada.
6.- Llevar un horario lo más regular posible.

7.- Consumir productos ecológicos y evitar alimentos procesados o tratados químicamente.

8.- Evitar materiales y productos sintéticos y químicos en casa, ropa y aseo.

9.- Evitar o minimizar el uso de móviles, ordenadores, televisión…

10.- Utilizar, a poder ser, cocina de gas. Evitar el microondas.

11.- Frotar el cuerpo con una toalla caliente y húmeda.

12.- Evitar baños y duchas prolongados.

13.- Mantener la casa ordenada y ventilada.

14.- Tener plantas verdes en casa.

15.- Mantener una buena relación con uno mismo y con los demás.

RECOMENDACIONES FINALES

Lo más importante es no esclavizarse con la alimentación, es decir, si quieres salir a comer un pincho y tomar algo, adelante. La macrobiótica es equivalente a libertad y, si nos cerramos a salir y a relacionarnos con gente que no piensa como nosotros, estamos yendo por el camino opuesto al que recomienda el espíritu macrobiótico.

En este resumen hay muchísimas recomendaciones; tú no te agobies, trata de hacerlo como puedas y, sobre todo, de disfrutar con lo que hagas. Muchas veces es mucho mejor hacer algo, digamos, “poco saludable”, que cumplir con las recomendaciones de mala manera y a disgusto.

Bienvenid@ a este apasionante mundo.

¡ Espero que te haga todavía más feliz ;-) !